Fernando Adrián corta una oreja con fuerte petición de la segunda en su debut en Bilbao

El tercero, “Palique” de nombre, negro mulato listón bragado, número 122, de 556 kilos, nacido en agosto de 2020, tuvo que ser devuelto a chiqueros tras evidenciar una lesión en una mano. En su lugar saltó al ruedo el primer sobrero, también del hierro de Fuente Ymbro, al que Fernando Adrián saludó con delantales templados y bien ejecutados. El toro fue bien picado y completó con corrección el tercio de varas. Inició faena de muleta de rodillas, con cambiados por la espalda, y desde ahí construyó una labor emocionante y de creciente intensidad ante un astado bravo y con transmisión. Faena de valor creciente, que terminó entre pitones, con un arrimón de mérito. Remató con bernadinas ligadas y una estocada de buena ejecución.

Cerró plaza el toro número 95, negro mulato bragado meano, nacido en septiembre de 2020, sexto del festejo y segundo del lote de Fernando Adrián. El madrileño lo saludó con disposición, dejando algunos detalles con el capote. Inició la faena de muleta al hilo de tablas, logrando muletazos de buen trazo en el arranque, pero pronto el astado empezó a poner dificultades. Aun así, Adrián no se dio por vencido y, con decisión, buscó sacarle partido, logrando muletazos sueltos pese a la condición del toro. Volvió a cerrar su labor entre pitones, con un arrimón sincero, aunque esta vez no hubo suerte con la espada.